Te siento lejos pero estás acá y no me podés ver. ¡Mirame, dale, animate! Observame con esos ojos hermosos que ocultan alegría. Dejate ser, mirame, amame. Mimame, mirame, amame. ¡Sé vos! Pintá, cantá, volá, amame. Abrí tus brazos y dejame caer al lado tuyo, como si fuera el fin del mundo todos los días. Levantémonos con sonrisas que inunden nuestras almas, canciones que nos llenen el cerebro de amor y mate que nos haga rebalsar el hígado. ¡Hablemos! ¡Sonriamos! Pero por sobre todo, seamos felices.